Una caja en un cajón

Una caja en un cajón
generacion

viernes, 21 de febrero de 2014

No sé todavía.

¿Que ya no tengo alas?
si, me queda un poco de alas,
me sirven,
tal vez no sean las mismas,
las que usaba para ir de acá
a tantas distancias,
en media hora, ¡en menos!
sobrevolando nubes blancas,
marrones, rojas, grises o un cielo sin nubes

O las que usaba para escapar de mi,
cuando se me hacía insoportable el dolor de muelas
que me dejó el beso
que no te robé en aquel estacionamiento
o para volver veloz a posar en tu ventana

Tener alas muchas veces
depende del clima con que me definas.
Puede que equivoqué al pensar que fueron
tus rayos y aquellas tempestades,
tus NO VUELVAS NUNCA
Tu "no te odio"

Me equivoqué y...
probablemente el clima que desmayó mi mente
y me hizo caer de grandes alturas
fue el más hermoso de los clima
que alguna vez existió,
ese clima con tu voz en el viento, cuando me diste sol,
y  me diste cirros y fresca brisa,
un clima que no podía dejar de ser bello,
nada más que bello, los olores del día más hermoso

probablemente,
me imagino, paso esto:
recuerdo ese día, por su tremenda belleza
que no saludaba, que hipnotizaba,
de pronto,
tanteé el viento y ya no tenía tu forma, ni tu voz,
desperté y abrí los ojos
y noté que ya no estabas
que te habías ido,
que me arrancaste las alas por la mitad
mientras me había quedado dormido
y de un salto desesperado
me elevé, pero no pude llegar lejos,
caí y rodé puteando en cada vuelco,
saliva colgante, bramando
y mis manos en la arena, perdedoras
probablemente fue así.. que perdí la mitad de mis alas.

¿Que ya no tengo alas?
si, me queda un poco de alas,
me sirven para evitar las escaleras
y bajar por el balcón a una velocidad
placentera a un hombre lento como yo
para cruzar a la otra vereda de un salto
para recordar lo bello de los días tormentosos.